29 de septiembre de 2008

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17 de septiembre de 2008

Datos Generales

La agricultura es una actividad que comenzó en el neolítico, antes de que existiera sólo había cazadores recolectores los cuales tomaban los alimentos que necesitaban de la naturaleza, para esto tenían que cambiar de lugar para que se regenerara su fuente de alimentos.
Con el tiempo, probablemente las mujeres, comenzaron a intervenir en los ciclos naturales de las plantas para hacerlas más productivas, con ello comenzó la agricultura.
Mesoamérica es una región muy fértil, donde se da muy bien esta actividad; en general los pueblos mesoamericanos desarrollaron una agricultura pluvial, y en algunos casos lacustre (como las chinampas de los mexicas)
Una característica importante en esta región es que los pueblos prehispánicos no limitaron su economía y alimentación a la agricultura, sino que la combinaron con la caza y la recolección.
La agricultura en Mesoamérica llego a ser también una actividad de intercambio, ya que se cambiaban cosechas por otros productos.
Las plantas que se cultivaron pasaron por un proceso de domesticación, en donde se cambiaron las características de las plantas y las hicieron dependientes de los humanos para su reproducción y cultivo.
En Mesoamérica se tenía un buen manejo del agua, hay restos de construcciones para el control, manejo y aprovechamiento del agua. Para la siembra se utilizaba, además de la lluvia el agua que escurría de los montes, el agua que se acumulaba en zonas cenagosas y se usaron otros recursos para tener un mayor aprovechamiento del agua, por ejemplo se construyeron laderas o muros de drenaje para aprovechar más el agua estancada y se construyeron montículos para no ahogar las cosechas.

Imágen del Códice Florentino

Productos alimenticios en Mesoamérica

La base de la alimentación en Mesoamérica era la milpa, esta consistía en un sembrado de maíz, chile, calabaza y frijol, estas plantas forman la tetralogía alimentaria. Tienen la ventaja de que pueden crecer juntas ya que comparten los nutrientes del suelo, además tienen una alta productividad.
Aparte de la tetralogía agrícola alimentaria también había otros productos que se utilizaban en esa época: Semillas de cacao, amaranto, chía, cacahuate y girasol; flores de calabaza, yuca o chocha, frutos como chayote, chilacayote, garambullo, mamey, aguacate, chirimoya, papaya, guanábana, chicozapote, zapotes, ciruelas, guayaba, pitaya, tuna, entre otros.
Más de 500 especies de insectos. Además de variedades de peces, mariscos, así como aves y mamíferos salvajes como: armadillo, liebre, venado, manatí, jabalíes, etc.



Técnica común de siembra



Las semillas que se usaban para la agricultura tenían todo un proceso de elección, primero se desgranaban las mazorcas y se elegían los granos que estuvieran “sanos”, es decir, que tuvieran buena forma, tamaño, color y que no estuvieran podridas; luego las semillas escogidas se ponían en agua por dos o tres días para procurar que tuvieran un buen germinado y asegurar una buena producción.
Luego se excavaba la tierra, se humedecía un poco y se hacían surcos o camellones (cuemitl), además se hacían rituales religiosos, pidiendo una buena cosecha y encargando a las divinidades que cuidaran el sembradío de animales e insectos.
El sembrador abría con un bastón de punta aguda llamado “coatl” un agujero en la tierra y ahí echaba uno, dos o más granos que llevaba cargando en una bolsa al hombro, después con el pie arrimaba un poco de tierra para tapar el agujero, así continuaba en línea recta sobre el camellón. Cuando acababa regaba a mano el campo. Cuando salía la planta se echaba más tierra y a veces se ponía una guía.
Este modo de sembrar resultaba bastante útil en cuanto a producción ya que no se perdía casi nada del grano que se sembraba y las cosechas eran muy abundantes.
Los trabajadores de la tierra eran personas que vivían para ello, madrugaban todos los días y si era necesario acortaban aún mas sus horas de comida y de sueño para procurar sus tierras, además eran personas que tenían que saber de todo, ciclos de la tierra, calendarios, etc. Tenían la fama de ser personas de buen juicio, cuidadosas, trabajadoras y prudentes.
Los hombres de la familia se encargaban de romper la tierra, removerla, sembrar y desgranar; y a las mujeres les tocaba limpiar el grano y preparalo.


Otros métodos de cultivo


Las terrazas surgieron como respuesta a los terrenos escarpados y con declives. Estas estructuras permitían atenuar los efectos de la erosión, aumentar el grosor del suelo, la cantidad de materia orgánica y la capacidad de absorción y retención de la humedad de la tierra. De ésta manera se aumentaba la superficie de cultivo y se permitía acortar los periodos de descanso del terreno.
Lo que se hacía era “escalonar” un cerro o un monte, para que quedaran terrenos planos en donde había un declive.
Generalmente las terrazas tenían zanjas para dar curso y salida al agua de lluvia, de esta manera se tenía un sistema de irrigación y se evitaban los deslaves. Para que las estructuras duraran los muros de las terrazas eran de piedra.
En algunos casos se hacían terrazas en el interior de las barrancas, éstas eran llamadas presas. Tenían muros de piedra que a veces presentaban algún tipo de vegetación, que lo que hacían era atrapar los sedimentos que iban cayendo, formando gradualmente la terraza

Otra técnica no tan productiva fue la llamada roza y quema, donde se talaba toda la vegetación de una zona y luego se quemaba, sobre las cenizas se sembraban las plantas y al acabar un ciclo agrícola había que dejar descansar el terreno, por lo que se pasaba a otra área para sembrar, formando así circuitos.
La ventaja de ésta técnica es que las cenizas de las plantas quemadas servían de fertilizante para los sembradíos

La Chinampa

Un gran desarrollo agrícola que se dio principalmente en el Valle de México fue la chinampa, la cual se basa en la construcción de una estructura hecha con un armazón de grandes troncos atados con cuerdas de ixtle que luego se completa con ramas, cañas y troncos más delgados. Posteriormente se cubre con capas de guijarros, grava y tierra para la siembra. Alrededor de la chinampas para sostenerlas, se siembran ahuejotes, unos árboles resistentes a la humedad cuyas raíces le daban sostén a al estructura
Al estar sobre el agua, la humedad impregnaba las chinampas y esto, junto con la tierra rica en nutrientes, hacía que la producción de calabazas, frijol, maíz, flores y otros vegetales, fuera enorme.
Esta técnica permite una agricultura intensiva y el problema del riego y de la sequía desaparecen, además la fertilidad de la tierra permitía cosechar más veces que cuando se sembraba en tierra firme.
Actualmente, Xochimilco es el único sitio donde todavía es posible ver, conocer y visitar las chinampas tradicionales y recorrer los canales que las separan. Algunas de ellas siguen sirviendo para producir hortalizas y flores.

Los Mayas






El área maya es un área de cultivo complicado, el suelo no es tan fértil como en el Valle de México ya que es una zona selvática, por ello los mayas usaron en sus terrenos la técnica de roza y quema; el problema con este técnica es que los campos se tienen que dejar un tiempo para que se recuperen y esto deja de ser rentable cuando la demanda de productos es alta.
Por ello en algunas zonas se ideó un sistema que se ha denominado de “campos levantados”, el cual tiene gran similitud a las chinampas del centro de México. Consisten éstos en concentraciones artificiales de tierra limitadas por canales de agua y situadas en márgenes de ríos y pantanos. Con este sistema, aseguraban una suficiente cantidad de tierra fértil bien irrigada, obteniéndose una producción abundante para alimentar a los ocupantes de los grandes núcleos urbanos. Además se usaron las terrazas con canales para controlar y rehusar el agua de lluvia.

Derivados del Maíz

El maíz sin duda fue uno de los productos con mayor importancia en Mesoamérica, ya que tenía una alta productividad y gran versatilidad para crear derivado de él.
El maíz tiene una enorme cantidad de usos, en la actualidad se conocen cerca de 300 productos que, en una u otra forma, son derivados del maíz o lo incluyen en su composición.
El grano se cosecha y se almacena y puede destinarse al consumo humano o para la siembra. Para la mayoría de los productos alimenticios es necesario someterlo a un proceso que consiste en su cocción con agua de cal, moliéndose posteriormente en molino para obtenerse la masa que se destina para la elaboración de tortillas, tlacoyos, sopes, tlayudas, tamales y atoles, entre otros. En algunos lugares se recogen las mazorcas incipientes llamadas jilotes y hervidas o crudas se consumen. También a partir del grano se puede producir hojuelas de harina de maíz, frituras, botana y aguardientes para fabricación de bebidas alcohólicas.También se extrae aceite, el cual tiene un alto valor nutritivo y es de fácil digestión.
Se puede usar para la fabricación de productos de panadería, mayonesas y margarinas.